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Emerxentes con Querida Margot: «Si analizas los costes y el tiempo empleado por los artistas, ver música en directo sale muy barato»

El grupo asturiano, ganadores del concurso 'Oviedo Rock 2023', se encuentra en la gira de su primer disco, 'Atentamente'

Por Marcos Fernández

‘Querida Margot’, como todo buen grupo de rock que se precie, tiene aura. Se nota en su música, en su presencia y en su forma de hablar sobre la industria y el panorama emerxente de la región. Quizás, fue ese aura el que les hizo alzarse ganadores del concurso ‘Oviedo Rock’ en el año 2023. Y, posiblemente, sea el motivo por el que su primer disco, ‘Atentamente’, esté teniendo tanto éxito, así como la gira que les  ha llevado no solo por las salas asturianas, sino también por las de otras comunidades como Galicia y Cantabria.

El grupo, que debe su nombre a un tango de Carlos Gardel, se formó a principios de 2022. Los cuatro integrantes conectaron de inmediato. «Nadie me puso muchas condiciones», bromea Nacho Fuente (voz y guitarra), impulsor inicial del proyecto. A él se sumó su hermano Carlos (batería), Miguel Rodríguez (bajo),  compañero en la Escuela Superior de Arte y Yago García (guitarra), al que descubrieron en las jam que organiza el Savoy. «Cada uno es de su padre y de su madre», comenta Yago al hablar de referencias musicales, pero considera que, a medida que comparten y crean música juntos, van «centrando más el tiro» hacia un sonido grupal definido. «Al final somos un grupo de rock y sabemos por dónde queremos tirar las canciones», explica Carlos, que cree que ser capaces de aprovechar sus distintas influencias y poder compenetrarlas es de las mejores cosas que tienen como banda.

 

Nacho Fuente, voz y guitarra

Otra de las virtudes que destacan de sí mismos es el espectáculo que ofrecen en concierto. Yago define a su grupo como ‘animales de escenario’ y cree que en parte eso fue lo que les ayudó a ganar el concurso ‘Oviedo Rock’ el año pasado. Subieron al escenario con confianza en su propuesta y de quedar primeros. «Al ver lo buenos que eran el resto de músicos, sabíamos que no iba a ser tan fácil», cuenta Miguel. Es el escenario más grande en el que han tocado hasta la fecha (sin contar su experiencia en el El Molinón durante un partido de los rojiblancos) y no había miedo, sino adrenalina. «Una de las cosas de las que más orgulloso estoy es que salimos a un escenario así igual que salimos a cualquier concierto en una sala», afirma Nacho. Esa adrenalina y su música consiguieron convencer al jurad.

Su primer disco, ‘Atentamente’, es autoproducido y autogestionado en colaboración con el músico Héctor Tuya. Como para todo artista emerxente, la experiencia de sacar adelante un disco es una proeza titánica. «Caótico», lo define Yago. «Parche tras parche», añade Nacho, que desgrana la duración de las fases. «Fueron unos seis meses de trabajo minucioso revisando letras, arreglos y demás con Héctor. La grabación duró casi un año y hubo muchos cambios y cosas que manejar con un presupuesto reducido», confiesa. Miguel asegura que el premio de 6.000 euros de Oviedo Rock fue el «empujón clave» para pulir todos esos detalles y sacar finalmente el álbum, que está cosechando buenos números en Spotify y cuyas copias físicas son un éxito tras cada concierto del grupo.

Yago García, guitarra

‘Querida Margot’ se encuentra actualmente de gira y la afluencia en las salas donde tocan, sea en Asturies o más allá de la tierrina, están superando las expectativas iniciales del grupo. «Siempre acaba viniendo más gente de la que espero en un principio», comparte Nacho, provocando la sonrisa del resto del grupo. Sus canciones ya se han oído en tierras gallegas y cántabras pero el objetivo, como dice Miguel, es «seguir ampliando horizontes», y que los viajes en furgoneta con el equipo de música a cuestas sean cada vez más repartidos y más lejos. Todo ello sin perder de vista la escena asturiana. Los cuatro coinciden en que existe mucho talento y mucha variedad aquí, teniendo cada género musical varias propuestas interesantes.

A pesar de estar disfrutando de un buen recorrido por las salas asturianas echan de menos la existencia de una ‘escena’. «Me refiero a esa unión o hermandad entre bandas. Al final el 80% de las bandas de Xixón tenemos contacto entre nosotras porque es lógico. Tocamos en los mismos sitios, paramos en los mismos bares y vamos a los mismos conciertos. Pero no existe una conexión entre nosotros», explica Nacho. Su hermano Carlos concuerda y ofrece un porqué. «Hay mucha diferencia de nivel o de reconocimiento, por así decirlo. Otras bandas de rock de por aquí, o acaban de empezar o juegan en otra liga distinta. Entonces eso dificulta un poco este tema de colaborar, porque aunque te lleves genial con ellos, no pegáis en temas de estilo o de situación«, expone el batería.

Carlos Fuente, batería

Una de las grandes batallas de los artistas emerxentes, sino la más grande, es enfrentarse a la reticencia de la gente a pagar por consumir cultura local, sea cual sea el precio. «Cuando tenía 15 años, un profesor me dijo una frase que siempre se me quedó grabada: ‘La música no es gratis y la gente se malacostumbra'», recuerda Nacho, que pone énfasis en que la música no deja de ser un trabajo y que, en cada concierto, hay dedicado mucho dinero y tiempo. «Al final, ver música en directo es realmente muy barato si te pones a analizar los costes y las horas empleadas por los artistas», sentencia el vocalista.

Ellos están dispuestos a seguir poniendo toda la carne en el asador. Y, aunque este primer disco aún está muy fresco ya piensan, con tranquilidad, en el siguiente. «Amenazamos con volver», avisa Carlos. Sus ‘queridos’, como se refieren a sus seguidores en redes sociales, pueden respirar tranquilos, porque a ‘Querida Margot’ aún le ‘Queda Rock & Roll’. Y quedan muchas colaboraciones. «Tenemos una pendiente con Diego Rodríguez», revelan. Fuera de la región, también esperan colaborar próximamente con el grupo madrileño Linze y con Maximiliano Calvo. Aunque, si tuviesen que escoger un grupo con el que compartir concierto, Miguel lo tiene claro. «Los Zigarros, creo que encajaríamos muy guay».

Miguel Rodríguez, bajo y coros

La entrevista ya ha terminado, pero Yago, Nacho, Miguel y Carlos, sentados en un sillón del Toma3, siguen charlando de su pasión, la música. «La gente que escucha las canciones de un disco en aleatorio es para meterlos en la cárcel», dice Yago, con una convicción que demuestra lo mucho que le molesta esa práctica. «Al final es como con las sitcoms, puedes ver un episodio suelto y que te guste, pero para entender la historia y los detalles, tienes que ir en orden», argumenta Nacho. Atrapado y entretenido en esa conversación casual, uno se da cuenta. Aura. Larga vida al rock.

Atentamente,

‘Querida Margot’