“La CometCon es un evento de referencia no solo para Asturias sino para todo el norte de España”, afirmó Sánchez Tejón, concejal de Promoción Económica, Empleo y Turismo, durante la inauguración de la décima edición de la convención. “Es una oportunidad para abrir a la región a un panorama nuevo”, añade Héctor Lasheras, director de la CometCon celebrada ente 2 y el 4 de septiembre en el recinto Ferial Luis Adaro.

De entre los 120 artesanos que levantaron sus puestos en el Pabellón Central del recinto ferial, las empresas de videojuegos y entretenimiento y la organización general del evento se encuentran cerca de 60 negocios asturianos. Por último, las asociaciones y organizaciones sin ánimo de lucro dedicadas a ofrecer un ocio alternativo a la juventud asturiana también han tenido una importante presencia en el evento.

“Dentro de unos estándares tratamos que entren primero los artesanos asturianos. A nivel empresarial y de hostelería de forma natural también se contacta con los servicios más cercanos. No queremos caer tanto en el localismo, pero sí contribuir al desarrollo de la región”, explica Lasheras. La CometCon cerró sus puertas ayer a las 20.00 horas y a esperas de los datos finales para realizar un balance oficial, los participantes asturianos ya tienen su veredicto. Aún con sus diferencias la mayoría coincide en que es una oportunidad para dar a conocer y lanzar sus negocios.

120 puestos de artesanía divididos en dos pabellones

“Estar aquí nos abre al público más allá de la pantalla, nos conoce más gente y esto nos permite crear un negocio propio, como la tienda online que estamos montando ahora”, afirmó la joven ilustradora de 24 años Nerea González. Junto a sus amigos, también artistas, Daniel Domínguez y Carla Fanjul, levantó un puesto de artesanía en el Pabellón Central donde vendieron llaveros, ilustraciones de series y videojuegos y encargos personalizados. El espacio les fue cedido gratuitamente por impartir un taller en el evento. “Tendríamos que pagar más de 100 euros por el puesto, además de todo el producto que traemos sin saber si lo vamos a vender. Si no fuera por hacer el taller, no podríamos estar aquí”, comentó Domínguez.

Nerea González, Daniel Domínguez y Carla Fanjul, en su puesto de la CometCon.

Aunque les sacan algunos años de experiencia los creadores de ‘Tiza y Peonza’, una marca de productos artesanos personalizados con mensajes en asturiano, también están dando sus primeros pasos en la CometCon. “Empezamos porque tuvimos un hijo y esta era nuestra forma de conciliar”, explicó Olaya Fuentes. Basados en Avilés, pero con un negocio fundamentalmente online consideran que este es “un buen festival para que te conozca la gente y vean la calidad del producto”. Con un balance de ventas muy positivo pueden afirmar que “hay mucha gente joven a la que le atraen proyectos profesionales que utilizan la llingua como vehículo”.

Ellos forman parte de los cerca de 40 artesanos asturianos que participaron en la CometCon. Junto a sus puestos se encuentran también comercios locales como ‘Notre Tattoo’, un estudio gijonés cuyos seis tatuadores no pasaron ni un minuto del evento sin trabajar. Su dueña, Lorena López, es “una friki” a la que le encanta el evento y está muy contenta de haber venido porque “nos está yendo super bien”. “Creo que es una gran ayuda para negocios como el nuestro porque llegas a gente a la que no puedes acceder a través de canales como Instagram, de donde vienen muchos de nuestros clientes”, afirmó.

Nerea López, de Notre Tattoo, haciendo un tatuaje.

Un espacio para dar a conocer emprendimientos alternativos

Lejos de lo que a veces se suele pensar el espíritu emprendedor con propuestas y tecnologías punteras no solo se encuentra en las grandes ciudades, en Asturias también hay quien se atreve a innovar y lo consigue.

El ingeniero químico Sergio Seronero se lanzó al emprendimiento en el sector agroalimentario en 2018, junto a dos compañeros de facultad. Empujados por el boom de la serie ‘Juego de Tronos’ y ante la saturación del mercado cervecero se pusieron a fabricar hidromiel hasta dar con la receta que hoy venden bajo la marca ‘Zángana’. “El principal hándicap que tenemos es que mucha gente no conoce la bebida o piensa que puede ser demasiado dulce. Eventos como este permite que muchos la prueben y les guste”, explicó Seronero. Llevan 3 años participando en la CometCon y a pesar de gastar más de 750 euros solo en el alquiler del espacio, les sale “rentable”.

Segio Seronero, socio de ‘Zángana’ posa junto a su hidromiel.

Pero si hay unos asturianos que se han atrevido con un negocio totalmente innovador son Pelayo Melón y Diego Pastrana, los impulsores de Hado Asturias. El Hado se trata del primer deporte virtual del mundo, un juego inventado en Japón que consiste en una suerte de balón prisionero que se juega con una pelota virtual. “Puedes poner escudos y elegir puntos de habilidad como hacer que tus bolas sean más grandes”, explicó Pastrana. En España, a parte de Asturias, el Hado solo se practica en Barcelona, Madrid y Mallorca. “Este noviembre lanzaremos el primer campeonato de Hado de Asturias y también queremos hacer una liga de institutos”, prosiguió. Con las cientos de personas que estos días lo han probado por primera vez quizás ya tengan un buen número de fichajes.

Ocio alternativo ‘made in Asturias’

Si por algo se distingue la CometCon es por ofrecer un entretenimiento inusual. Conseguir una máquina de realidad virtual, videojuegos de realidad aumentada o impresoras 3D no está al alcance de cualquiera, salvo que se encuentre en un evento como este o un espacio como ‘Arkuos’, que propone un ocio alternativo para jóvenes. Esta asociación sin ánimo de lucro radicada en Langreo nació en 2021 y se define como un espacio socioeducativo para jóvenes de entre 7 y 24 años. “La CometCon significa sacar ‘Arkuos’ fuera de sus paredes y expandir nuestra filosofía para que la gente vea que existen espacios donde los chavales desarrollan sus inquietudes y pueden hacerlo con tecnología muy puntera”, explica Sergio Lafuente, uno de los mentores de asociación.

De los videojuegos y mundos virtuales de ‘Arkuos’ a los juegos de toda la vida, los de mesa, para ellos también hubo espacio en la convención. En 2013, ante la llegada de la apisonadora de los servicios streaming, Ángel Galindo comenzó a cambiar las películas de las estanterías de su videoclub avilesino por juegos de mesa. Hoy en día el éxito de su negocio, ‘La orden del cisne’, es palpable en la CometCon: “hace dos años solo pusimos unas cinco mesas para que la gente probase los juegos. Estos años tenemos treinta siempre llenas y hemos contratado a tres demostradores que enseñan a jugar«. “Eventos como este nos sirven más por la publicidad que por el beneficio que obtenemos directamente”, explicó Galindo.

Ángel Galindo e Isable Manso, dueños de ‘La orden del Cisne’ junto a su empleada Silvia Braña.

Y del entretenimiento analógico, al medieval, porque en la convención se han dado cita no una sino dos asociaciones dedicadas a la práctica de la esgrima histórica, ‘Éstula’, con sede en Llanera, y Gaudiosa, de Oviedo. Además de las exhibiciones, han estado dando clases con espadas largas y armas de asta a todos los curiosos y el éxito ha sido tal que “tras el primer día tuvimos que cambiar la dinámica de los talleres porque venían grupos de 20 personas y solo teníamos 11 armas”, relató Eliana Campos, secretaria de Éstula’.

Exhibición de esgrima histórica en el anfiteatro del recinto ferial Luis Adaro

Además de toda la oferta de entretenimiento ‘made in Asturias’ que se pudo encontrar en los pabellones la CometCon también contrató servicios de seguridad, restauración y limpieza, así como los hinchables para los más pequeños, ofrecidos por empresas regionales. Aunque los que han estado dentro se muestran muy satisfechos con la organizaición y los resultados del festival, hay quien reclama haberse quedado fuera. La asociación K-pop Asgaya, una organización juveni dedidaca a organizar eventos en torno a la música coreana en Asturias lamentan que, depsués de años colaborando, no hayan contado con ellas en una edición que ha contado con más presencia que nunca del k-pop.