“Un festival que aúne la tradición y la innovación”, así definió Manuel Vallina, Concejal de Cultura del Ayuntamiento de Gijón,el festival ‘Al Resve’ durante la presentación frente a la Casa del Chino en el barrio de Cimavilla. Del 7 al 18 de septiembre, coincidiendo con las fiestas del barrio más antiguo de la ciudad, las calles se llenarán de música, teatro y baile para todos los públicos.
«Aquí actuaron las Tanxungueiras antes de ser tan conocidas”, recordó con orgullo Miguel Barrero, director en la Fundación Municipal de Cultura, con objetivo de resaltar la importancia de este festival que celebra “la cultura asturiana y la llingua”. Las Tanxungueiras es el grupo integrado por tres gallegas que revisan la tradición musical de su tierra combinándola con géneros actuales y se quedaron a las puertas de representar a España en Eurovisión 2022. Como ellas, la afamada cantante Anabel Santiago, el joven grupo Algaire o las mujeres de 6 Riales, hacen un folk para la modernidad y actuarán, entre otros, en los escenarios de ‘Al Resve’.
Todos los shows se realizarán a pie de calle y serán gratuitos, por lo que podrían cancelarse debido a las inclemencias meteorológicas. Además de actuaciones musicales el grupo Ecenapache representará ‘Caperucita de Muniellos’, una obra de comedia para los más pequeños. El público infantil también podrá disfrutar de las canciones para niños de David Varela y Alicia Álvarez. Para los mayores, el cantautor Jerónimo Granda pondrá la nota de humor con un concierto que combina el folclore con monólogos satíricos. Con motivo de conmemorar y reivindicar la llingua como parte fundamental de nuestra cultura, toda la cartelería del evento, así como los programos están escritos en asturiano.
Las plazas de La Corrada, Jovellanos, Arturo Arias y La Soledad serán el escenario de la tercera edición de este festival, que ni siquiera la pandemia pudo interrumpir. Quiénes sí llevan sin organizar ningún sarao, incluso antes del parón obligatorio de la COVID, son los vecinos de Cimavilla, que este año retoman con ilusión las fiestas en conmemoración de las vírgenes de los Remedios y la Soledad. La Asociación de Festejos del barrio ha trabajado codo a codo con la municipalidad para que el festival y las fiestas puedan convivir.
“Nos da mucha vida meter un poco más de cultura y que no sea todo rock y pachanga”, destacó Omar López, presidente de la Asociación de Festejos de Cimavilla, sobre la coincidencia de Al Resve con las actividades que coordina junto a los otros vecinos del barrio. Desde 2018, un año antes de la pandemia, no se celebran las fiestas de la Virgen de Los Remedios y La Soledad. El desencuentro entre el ayuntamiento y la asociación de festejos provocó que estas se suspendieran. “Seguimos con muchos de los problemas que teníamos. Seguimos buscando un local para la decoración, pero con trabajo podrá salir”, reflexionó López.