Las palabras del portavoz de la diplomacia estadounidense apoyando a Marruecos podrían haberse malinterpretado por los medios españoles. Al parecer, al hablar del papel clave de Marruecos en la estabilidad de la región, el diplomático no se refería a la tensión en Ceuta, sino al conflicto entre Israel y Palestina.
Para evitar suspicacias, una portavoz del Departamento de Estado del país norteamericano ha adoptado una posición equidistante entre España y Marruecos para que «busquen conjuntamente» una solución.
Estas declaraciones se producen bajo un clima de presión sobre el presidente Biden: senadores de ambos partidos y otros grupos proisrael han pedido que aclare si comparte la postura de Trump a favor de la soberanía de Marruecos sobre el Sáhara Occidental.