La Junta de Castilla y León pedirá para toda España un toque de queda desde la 1:00 hasta las 6:00 de la mañana. Lo hará en el Consejo Interterritorial de Salud, el órgano de cooperación de los distintos servicios de salud autonómicos del país, que ha cobrado especial protagonismo durante la pandemia.
Verónica Casado, consejera de Sanidad de la comunidad castellanoleonesa, propondrá aplicar dichas restricciones después de que el nivel de incidencia de esta autonomía alcanzara los 278 casos por cada 100.000 habitantes. Este índice supera los mil casos entre los jóvenes de 12 a 29 años.
Verónica Casado ha defendido el toque de queda como una «grandísima medida» que ya funcionó para doblegar la curva de contagios después de Navidad. La consejera también podría plantear la recuperación del uso de mascarillas en espacios abiertos y pedirá más vacunas para mantener el ritmo de inmunización.