Unos 3.300 militares del Ejército de Tierra se han desplegado hoy en Ceuta para tratar de controlar la oleada de entradas irregulares que se han producido en la ciudad. A ellos podrían sumarse más efectivos en caso de que fuera necesario levantar campamentos temporales.
Las primeras informaciones oficiales explicaban que las labores del Ejército eran de agrupación de inmigrantes y logística. Sin embargo, las posteriores oleadas han obligado a los militares a tomar posiciones junto a la frontera y contener las entradas.
Fuentes del Gobierno han informado de que, a última hora de la tarde del martes, 8.000 personas habían cruzado la frontera. De ellas, 4.000 han sido devueltas.