El juez Santiago Pedraz no ha impuesto medida cautelar alguna sobre Brahim Gali, líder del Frente Polisario y presidente de la RASD. El hecho de que se haya personado voluntariamente en la causa demuestra, según el magistrado, que no hay riesgo de fuga. Horas después de esta decisión, Gali abandonaba España en un avión argelino.
Pedraz ha señalado también que la acusación no ha aportado siquiera indicios de que pudiera haberse cometido destrucción de pruebas ni reiteración delictiva.
Ghali ha comparecido telemáticamente antes de abandonar España a raíz de las querellas interpuestas durante los últimos años por genocidio, torturas y delitos de lesa humanidad. Esta comparecencia ha tenido lugar en plena crisis diplomática con Marruecos, que ha pedido al Gobierno español que se posicione claramente en torno al Sáhara Occidental.