El aterrizaje forzado por el gobierno de Bielorrusia para detener al periodista Roman Protasevich y su pareja tendrá una respuesta de la Unión Europea, que ha pedido la liberación inmediata de ambos y una investigación sobre el incidente.
Los 27 han recomendado a las aerolíneas europeas que eviten el espacio aéreo de Bielorrusia y han prohibido a las de este país que vuelen sobre el espacio europeo. Habrá también una propuesta de sanciones económicas en las que ya se está trabajando.
El gobierno bielorruso ha difundido un vídeo en el que el periodista detenido ha reconocido ser el responsable de haber organizado disturbios. Diversas fuentes apuntan a que el periodista podría haber sido torturado para que realizara esas declaraciones frente a una cámara.