Leo Messi, ya ex jugador del Fútbol Club Barcelona, se ha despedido del equipo y la afición en una rueda de prensa en la que no ha podido evitar las lágrimas.
«Estuve pensando, dándole vueltas a lo que podía decir, y no me salía nada. No estaba preparado para irme. El año pasado, cuando se montó el lío con el burofax, sí lo estaba, Estaba convencido, pero este año, no. Mi familia y yo estábamos convencidos de que íbamos a seguir aquí, en nuestra casa. Siempre sobrepusimos nuestro bienestar, estar en nuestra casa y seguir disfrutando de esta vida que tenemos en Barcelona, tanto en lo deportivo como en lo cotidiano, que es maravillosa», aseguró el argentino al inicio de su declaración.
El argentino añadió que «pasados los años, voy a volver. Esta es nuestra casa. Y se lo prometí a mis hijos también», ha asegurado. Messi no negó conversaciones con el PSG, aunque recalcó que no hay nada cerrado. También manifestó que hizo todo lo posible por quedarse en el Barça: «Acepté bajarme el sueldo un 50%, no me pidieron nada más», aseguró.