Pedro Sánchez viajó ayer por la tarde a Nueva York para participar en la apertura del 76 periodo de sesiones de la Asamblea General de la ONU. El viaje, que en un principio iba a durar cinco días e iba a estar repleto de actividades, se ha reducido a tan solo una jornada para que el presidente pudiera estar presente en la isla de La Palma.
La intención del Gobierno era continuar con la búsqueda de inversores internacionales en Estados Unidos y aprovechar para que el presidente se reuniera de nuevo con otros líderes mundiales. Sin embargo, la prioridad de Sánchez es ahora dar su apoyo a los afectados por la erupción del volcán.
Tras su intervención de hoy en Nueva York, el presidente regresará mañana a La Palma con la intención de acompañar a los Reyes Don Felipe VI y Doña Letizia en su visita a las zonas más afectadas por la erupción.